Speedmaster XL 106-8-P. Registro perfecto, maculatura mínima, calidad de impresión constantemente alta a 18.000 pliegos por hora en cara y retiración.
“Para afianzar el éxito de mi empresa, necesito máquinas que rindan y sean fiables, que nos permitan seguir técnicamente a la cabeza y ofrecer a nuestros clientes el mejor servicio posible. Queríamos aumentar la productividad y la velocidad sin que ello afectara a la calidad. Para conseguirlo, la única opción que nos planteamos fue una Speedmaster de Heidelberg.” Para Jacques Fabrégat, fundador y director de JF Impression, la satisfacción de sus clientes es el criterio determinante para decidir una inversión. Este fue el motivo de que su elección recayera en la Speedmaster XL 106 Ocho Colores con inversor y 18.000 pliegos por hora de velocidad de producción: la primera en instalarse en Francia con esta configuración.
La imprenta JF Impression está afincada en Montpellier. Su plantilla de 44 personas empleados produce en tres turnos de trabajo impresos de todo tipo, también del segmento Premium. Como miembro de la asociación francesa de impresores ImpriFrance, Druckerei JF Impression dispone del sello de calidad Imprim’Vert y trabaja con papeles FSC/PEFC. Desde 2012 está igualmente en posesión de una certificación ISO 12647-2 con la que han estandarizado los procesos de producción internos de la empresa con la ayuda de los expertos de Heidelberg.
Jacques Fabrégat resume así las ventajas de la Speedmaster XL 106: “Imprimimos en cara y retiración en una sola pasada a una velocidad de 18.000 pliegos a la hora con un registro perfecto, una calidad de impresión constantemente elevada y mucho menos maculatura gracias al Prinect Inpress Control. No se puede decir más. Con el AutoPlate XL System, además, podemos cambiar todas las planchas de los ocho cuerpos de impresión en un tiempo récord de un minuto y medio de forma simultánea y sincronizada. Una XL 106 con este equipamiento es, hoy por hoy, la máquina más eficaz del mercado, tanto para tiradas cortas como para tiradas largas. Esto hace que, al comparar impresión digital e impresión offset, la balanza se incline claramente en favor del offset ya que con la reducción de los tiempos de preparación de la máquina cuando hay frecuentes cambios de planchas se consigue ahorrar mucho tiempo.”
